3 de diciembre de 2008

El Sainete: "LAS PAPELETAS DE LA RIFA" (Escena III.) (Primera parte.)

Amanecer. Paraje de la Casa de Campo. A la izquierda de la escena, están PONCE y VALENTÍN. A la derecha, los tres HERMANOS de la VICENTA, con aspecto de rudos pendencieros, en actitud expectante. Y, en el centro, dos TESTIGOS, que conversan entre sí.

VALENTÍN: (Nervioso y atribulado.) Ponce, amigo, la primera duda que me asola: ¿el duelo será a espada o a pistola?

PONCE: A espada, siempre a espada.

VALENTÍN: ¿Y si la mía no está cargada?

PONCE: Valentín, amigo, deliras. Si se saben manejar, todas las espadas están cargadas.

VALENTÍN: En poco más de cinco minutos la del hermano de la Vicenta, de mi sangre, seguro, embotada. ¿Y si por innovar que use él la espada y hago yo lo propio con la pistola?...

PONCE: No procede. Ese es duelo desigual.

VALENTÍN: Desigual es que semejante rufián dé muerte a tan presto galán. ¿No están estos duelos categorizados? ¿En qué hipódromo se ha visto que un burro se mida con el más gentil de los caballos?

TESTIGO 1: (Dirigiéndose a ambos lados del escenario.) Caballeros, acudan a este punto.

VALENTÍN: (Para sí.) ¿Y si a este juez yo le unto?

PONCE empuja a VALENTÍN al centro del escenario, donde también acude el HERMANO 1.

HERMANO 1: (A VALENTÍN. Amenazante) Mequetrefe, mi prima es un manjar que tus hocicos no van a catar.

TESTIGO 1: Caballero, guarde silencio. Imagino que conocen bien la reglas de este disputar…

(El TESTIGO 1 les ofrece a los duelistas dos floretes que, a su vez le ha facilitado a él el TESTIGO 2. El HERMANO 1 escoge primero, decidido. VALENTÍN, en cambio, tembloroso, coge el que queda.)

TESTIGO 1: Ya saben: espalda con espalda. A la que yo vaya contando, cada uno, diez pasos anda.

(Los duelistas se colocan espalda con espalda. El TESTIGO 1 se aparta unos pasos, quedando en el eje de ambos.)

TESTIGO 1: ¡Uno!

(Según el TESTIGO 1 vaya enumerando, irán los duelistas avanzando.)

VALENTÍN: (Para sí. Sacando fuerzas de flaqueza.) ¡Por don Miguel de Unamuno!

TESTIGO 1: ¡Dos!

VALENTÍN: ¡Por don Benito Pérez Galdós!

TESTIGO 1: Caballero, callarse es su deber. ¡Tres!... ¡Cuatro!...

VALENTÍN: El microscopio: ¡menudo aparato!

TESTIGO 1: ¡Cinco!... ¡Seis!...

VALENTÍN: Ya no me véis…

(En ese momento, VALENTÍN arranca a correr, pero, antes de salir de escena, se topa con CATALINA, una bella mujer, que aparece repentinamente.)

CATALINA: ¡Alto todos! (Dirigiéndose a sus primos.) Cuadrilla de matones beodos...

4 comentarios:

Rubén Moreno Castellanos dijo...

Y de esta obra sacó Chimo Bayo su canción????

Quieres acabar de una santa vez!!!!!!!!!!!!

Anónimo dijo...

me has dejado alucinado, que manera de conseguir atraer a los lectores... te felicito, pero debo decirte que, a veces, la rima se te suelta...

Anónimo dijo...

Apreciado lector anónimo, con usted estoy en que, más de una vez, a este humilde sainetero, la rima se le suelta; pero, la verdad, me resultaría más preocupante que, en medio de un discurso, más que la rima, se me soltasen los tirantes...

Anónimo dijo...

Pues sí señor, estoy con usted en que sería más bochornoso verse en calzones en medio de un gran discurso, que no encontrar la rima perfecta para tan agradable historieta, que como supongo sabrá, nuestros clásicos también sufrían de esos infortunios componiendo sus grandes obras(y no me refiero a quedarse con las vergüenzas colgando...)